El camino (The Road, E.U.A., 2009)

Karla Paniagua Ramírez

Coordinadora de investigación.Directora de la especialidad en Diseño del mañana. Centro de diseño, cine y televisión

Padre e hijo recorren el camino rumbo a la costa en esta obra de John Hillcoaty que adapta la novela homónima de Cormac McCarthy. Los hechos ocurren en el 2019, tras una catástrofe mundial que no es revelada al espectador: lo que podemos percibir es que la Tierra ha muerto, la vegetación y los animales no humanos prácticamente han desaparecido, sobre la superficie se extienden el frío y la contaminación mientras que los pocos sobrevivientes se han vuelto nómadas en busca de alimento, que incluye a otros humanos.

Les recomiendo esta película por varias razones. La primera, porque nos plantea un futuro no muy lejano y altamente probable: nada de lo que allí ocurre parece quimérico, incluyendo la atrocidad del humano alimentándose de otros humanos.

La segunda razón es porque la narración es simple y poderosa. Se trata de una historia acerca de los lazos del amor y cómo estos se ven trastocados por la calamidad. Las imágenes, los hechos y las interpretaciones le resultarán difíciles de olvidar.

The Road es una invitación para pensar en el futuro para tomar decisiones distintas en el presente. Aunque el desastre ecológico constituye el telón de fondo y no el centro de la historia nos invita a preguntarnos qué estamos haciendo aquí y ahora para evitar ese futuro indeseable.

Hace unos pocos años Juan Carlos Mora, experto del instituto de Geofísica de la UNAM, afirmó que los desastres naturales no existen. Es decir que los cataclismos son, en buena medida, resultado de nuestra dificultad (¿necedad?) para avizorar los futuros posibles, probables o preferibles y para emprender acciones necesarias para evitar aquello que compromete nuestra supervivencia.
Encontrarán esta película en Netflix, no se la pierdan.

Con esta entrega Cinemantropos festeja 15 años de publicación ininterrumpida. Agradezco a los lectores que me han acompañado a lo largo de este tiempo: les invito a hacerme llegar sus siempre valiosos comentarios.