Desplazamientos en la CDMX tras los sismos de septiembre de 2017

Fig. 1

Alejandra López Caloca, Adán Salazar-Garibay y Guadalupe Rivera

Investigadores del CentroGeo

La Ciudad de México está asentada en terrenos lacustres, por lo que presenta procesos de hundimiento (subsidencia) producidos por las fuerzas geológicas naturales que transforman la superficie de la tierra y, adicionalmente, por la extracción del agua del subsuelo y de los acuíferos, teniendo como efecto que el terreno se mueva.

Analizar los problemas de subsidencia e impacto de sismos en la Ciudad de México se vuelve indispensable desde muchos ángulos de estudio que abarcan, entre otros, su relación con las zonas de riesgo sísmico y los problemas que se generan en la infraestructura urbana subterránea, ante el hundimiento del medio construido. En este contexto, esta zona urbana se ha constituido en un sitio característico de gran importancia para el estudio de dichos fenómenos a nivel nacional e internacional.

Los recientes sismos del 7 y 19 de septiembre de 2017 ocurridos en México, nos han motivado a realizar un estudio sobre las características del movimiento de los suelos de la zona metropolitana de la Ciudad de México, aplicando técnicas de radar. Este estudio comprende el uso de la información de sensores, a partir de dos interferogramas, que muestran los cambios que se produjeron un día después de cada uno de los eventos ocurridos.

La interferometría de radar es una forma de detectar, por medio de sensores remotos, cambios físicos de la tierra y la subsidencia del terreno. Los interferogramas fueron calculados con datos capturados por el Satelite Sentinel 1A en modo ascendente. Las fechas de capturas de las imágenes se realizaron entre 10 de Julio de 2017 y el 8 de Septiembre de 2017 para el evento del 7 de septiembre. Y para el segundo, del 19 de septiembre, entre el 10 de Julio de 2017 y el 20 de Septiembre de 2017.

La información de los satélites Sentinel 1A y 1B es aplicable al análisis de la técnica de interferometría diferencial de radar de apertura sintética (DinSAR). Por sus características de resolución espacial y temporal, estos datos analizados con dichas técnicas permiten identificar y dar seguimiento a patrones complejos relacionados con desplazamientos del terreno y movimientos que potencialmente, afectan infraestructuras urbanas, ductos o tuberías subterráneas. Esta técnica es altamente sensible al cambio y puede detectar problemas de subsidencia y movimiento del orden de milímetros.

Sentinel-1A porta un radar de apertura sintética (SAR) y produce, desde finales de 2014, imágenes que cubren una misma escena de la superficie terrestre de alrededor un ancho de barrido de 250  km, en un ciclo de 12 días y con una resolución media de 20m. La periodicidad de datos de una misma escena se está reduciendo a 6 días  con los datos de Sentinel-1B, que ya está en órbita desde Abril de 2016.

Resultados obtenidos de la aplicación de la técnica de interferometría de radar, la cual permite detectar movimientos detallados de la superficie terrestre. El mapa representa movimientos ocurridos el 19 de septiembre del 2017.


Fuente: Sentinel 1A, formato complejo SLC (Single Look Complex), modo ascendente, 20 m de resolución espacial. Datos gratuitos y de libre acceso de la Agencia Espacial Europea.

Colegas de CentroGeo, nos comparten la investigación realizada por motivo de los sismos ocurridos en la Ciudad de México en septiembre de 2017, «Desplazamiento en la CDMX resultante de los sismos de septiembre de 2017» aqui la liga: http://www.centrogeo.org.mx/index.php/desplazamiento-en-la-cdmx-resultante-de-los-sismos-de-septiembre-de-2017